Un hombre solitario que pasea por la ciudad, encuentra un pez “que le sonríe”.

No existe nada más poderoso que sentir que algo (lo que sea) te mira, te habla o se dirige a ti. Un ser tan pequeño, aparentemente ajeno a lo que sucede más allá del cristal de su pecera, es capaz de cautivar con solo su sonrisa al más despistado de los viandantes. Una sola noche es suficiente para que un sueño, cambie por completo al hombre por dentro. La historia aparentemente sencilla, nos hace ver que podemos ser capaces de imaginar la felicidad en aquel ser que realmente siente tristeza, solo por sentirnos felices nosotros mismos. Destacamos su ligereza y a la vez su potente mensaje, la ilustración de los luminosos azules y verdes nos cautivan con rotundidad, pero sin el menor esfuerzo al lector. Además, el trabajo de este precioso álbum ilustrado se puede complementar con este corto de animación. Galardonado en el año 2006 el premio al Mejor corto de animación en el Festival Internacional de Berlín.

Biblioteca Pública Municipal de Cigales (Valladolid)

https://www.youtube.com/watch?v=DJiWJihcuIs